Le Corbusier


Le Corbusier

LE CORBUSIER
Charles-Edouard Jeanneret, conocido como Le Corbusier, nace a La Chaux-de-Fonds (Suiza) el 6 de octubre de 1887. Cursa estudios de grabado para la industria del reloj en la Escuela de Arte de su ciudad natal. Uno de sus profesores será el pintor L’Esplattenier, que le dirige hacia la arquitectura.

Entre 1907 y 1911 realiza una serie de viajes por Europa, visitando los estudios de los grandes arquitectos modernos. En París trabaja como diseñador, durante 14 meses en el estudio de Auguste Perret, en Viena entra en contacto con el mundo de la Secesión vienesa. En Berlín frecuenta el estudio de Peter Behrens, donde conoce a Gropius y a Mies van der Rohe. Viaja por Italia, los Balcanes, Grecia y Turquía. Es un periodo de formación y descubrimientos fundamentales para la evolución de Le Corbusier.

Durante 1911 y 1916 empieza la carrera de arquitectura en Chaux-de-Fonds y pinta acuarelas de temática intimista o mitológica de inspiración fauvista y cubista.

 Fija su residencia en París en 1917, y al año siguiente conoce a Amédée Ozenfant que le inicia en la pintura, reafirmando su vocación pictórica. Los dos, como reacción al cubismo, publican el manifiesto “Après le cubisme” que será el fundamento de su pintura purista, basada en el rigor y la pureza de les composiciones. Desarrollan la técnica de “unión de contornos de los objetos”: los objetos están unidos por un contorno común sin deformarse. En diciembre expone en la galería Thomas de París.

 En 1920 funda con Ozenfant y Paul Dermée la revista “L’Esprit Nouveau”. Firma su primer artículo con el pseudónimo Le Corbusier.

En 1921 expone en la galería Druet de París, con Ozenfant. Será ya una pintura madura, y en 1922 participa en el Salon des Indépendants. Se centra en la arquitectura, obre su estudio de arquitectura con su primo Pierre Jeanneret.

Entra en contacto con el coleccionista de pintura cubista Raul La Roche, para el que realizará la “Villa La Roche”. En 1923 expone de nuevo con Ozenfant en la galería “L’Effort moderne” de Leonce Rosenberg de París.

En 1925 se rompe la amistad con Ozenfant y se cierra la revista “L’esprit noveau” pero Le Corbusier continúa investigando los principios puristas en su pintura.

Pasará de representar los objetos industriales (botellas, vasos...) a los objetos típicos cubistas como la guitarra. Hacia 1928, la figura femenina pasa a ser habitual: una mujer hierática y escultural.

Coincide con Léger en la búsqueda de nuevas metas artísticas a partir de la función de los colores en la arquitectura haciéndose inevitables las influencias de mutuas, sobre todo durante las décadas de los 20 y los 30.

En 1927 viaja a Madrid y da unas conferencias en la Residencia de Estudiantes. Allí conocerá a Josep Lluís Sert, que le propone dar una conferencia a Barcelona, lo que le permitirá conocer la obra de Antoni Gaudí.

Es miembro fundador del CIAM Congreso Internacional de’ Arquitectura Moderna en La Sarraz (Suiza) de 1928. Finaliza su periodo purista y utiliza el pseudónimo Le Corbusier para firmar les sus pinturas. Incorpora nuevas imágenes: los “objetos a reacción poética”: objetos que la naturaleza forma y deforma como piedras erosionades, raíces, maderas...

Del 1931 al 1934, desarrolla la técnica de “Unión de contornos”, ahora aplicado al tema de la mujer, que se convierte definitivamente en la temática principal de su obra, surge la serie “Icônes” pintando a su mujer, Yvonne, con las manos juntas. La figura femenina es más dinámica.

Le Corbusier, desde su primer contacta con el arquitecto Sert tendrá un vínculo especial con Barcelona: admira la obra de Gaudí, participa en el Congreso del CIRPAC impartiendo una conferencia sobre urbanismo y, muy especialmente, con el proyecto del plan Macià para una zona residencial de Barcelona.

También en la plástica hay una obra que le liga a nuestra ciudad y que presentamos en nuestra galería: “Chute de Barcelona” (la caída de Barcelona), del 1939, una alegoría de la caída de la ciudad en la guerra civil de la que hizo diferentes versiones.

A mediados de la década de los 30 realiza los primeros collages y dibujos para tapicerías. Estudia la aplicación de técnicas artísticas a la industria y la arquitectura.

En 1930 presenta una exposición retrospectiva de su obra plástica en la Kunsthaus de Zurich.

Durante la 2º Guerra Mundial cambia de residencia, se traslada primero a Vezelay y después a Ozon (Pirineo francés) donde trabajará la escultura junto al escultor Joseph Savina que hará en tres dimensiones sus proyectos, que titulará Ozon o Ubu.

Investiga en la relación del trazo del dibujo y sus zonas de color y la utilización del color por planos, que también se refleja en su obra arquitectónica como es la Unité d’habitation de Marsella.

A finales de la década de los 40 trabaja en el libro “Poème de l’angle droit” que le llevará a realizar un mural en el pabellón suizo de la Ciudad Universitaria de París.

Pierre Beaudoin le anima a crear cartones para a tapices, que serán tejidos en Aubusson. Será una concepción de los tapices como “mural de los tiempos modernos” que él llama “mural nómada”: una pintura mural móvil, que puede cambiar de lugar como lo hace el hombre moderno.

 En 1950 publica Modulor, el resultado de una búsqueda sobre las proporciones, tema recurrente en su trabajo. Será un año de cambios importantes en su pintura, concretamente en los nuevos temes que aborda. Inicia la gran serie llamada “Taureaux”. La introducción y desarrollo de este tema hasta 1963 nos llevará a unas pinturas poéticas, misteriosas y geométricas, fruto de las influencias de la India y el mundo mediterráneo y la mitología clásica.

Otro tema de madurez de Le Corbusier es el de la mano. La representación de la mano abierta, marcada por su pensamiento “Plein main j’ai reçu plein main je donne (recibo a manos llenas, doy a manos llenas)”. La mano es el punto de contacto entre el arquitecto y el mundo y el órgano que le permite a este dar y recibir. 

En 1953 hará importantes exposiciones en el Musée d’Art Moderne de París o en la Kunsthalle de Berna a las que seguirán muchas otras por todo el mundo.

 Publicado en 1955, el libro litográfico “Le poème de l’angle droit” es una recapitulación de su trayectoria y un resumen de sus ideas sobre a la creatividad artística y arquitectónica en un libro de litografías.

 En 1958 Heidi Webber entra en contacto con Le Corbusier para editar sus muebles encargándose ella de la producción. También le anima a adentrarse en el mundo del grabado y le propone diseñar un pabellón de exposiciones para sus propias obras, el “Heidi Webber Museum-Centre Le Corbusier” en Zúrich. Fue el último edificio que diseñó, en él se exponen sus obras representando una unidad armónica entre arquitectura, pintura y escultura. Le Corbusier no lo podrá ver acabado ya que se inaugurará el 15 de julio de 1967 y él muere en 1965.

Le Corbusier CV

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